domingo, 2 de abril de 2017

La imferpeccta


La perfección no existe, es bien sabido
que  el rostro más hermoso siempre oferta
un lunar imprevisto que despierta 
la gracia que lo salva de aburrido.

La hechicera de Éboli fue tuerta...
El  escritor más grande que ha nacido
 era tirando a manco y el  oído
de  Beethoven más sordo que una puerta...

El orden natural sobreentendido
que  no pretenda nadie que pervierta
mi pluma, que se jacta de inexperta,
dando a luz un soneto relamido.

Y , ya me conocéis, me quiero muerta
antes que irreprochable por descuido.

Llamadme "la imferpecta"... Es un cumplido.



No hay comentarios:

Publicar un comentario