Echo
en falta unos brazos, para asirme
a
la vida, tan ruin, con avaricia
y
un pecho acogedor , que la franquicia
de
su confort me ofrezca, en que dormirme.
Necesito
una boca , esa caricia
de
su beso ,capaz de seducirme,
y
una voz cordial que reafirme
mi
valía envolviéndome en su albricia.
Aunque me reconozco en mi carencia
la
más frágil y mísera criatura,
sé que hay algo en que reboso competencia.
Me
sobra devoción para adorarte.
Me
sobran la pasión y la ternura
y
tanto, tanto amor que regalarte...
No hay comentarios:
Publicar un comentario