Busque sobre
el desierto que es el mundo
un
lugar generoso que ofreciera
un
momento de calma verdadera
a
un corazón cansado y vagabundo
Cuando
muerta de sed agonizaba,
y
los cuervos seguían mi andadura
vi
la luz de un oasis , gloria pura,
que
su fresco socorro me ofertaba
Tus
labios , esa mezcla de ambrosía
y
agua de miel que ansiaban mis despojos,
sal sin sabor , estaban allí mismo.
Pero
qué poco dura la alegría
en
la casa del pobre, abrí los ojos
y
vi que eras solo un espejismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario